5 de junio de 2012

Entrevista a Félix Cárdenas: ´La descolonización no es asunto de ley, sino de iniciativas`

Según la autoridad, la Asamblea Constituyente dio paso al proceso de descolonización en Bolivia, y la nacionalización de los hidrocarburos, en mayo de 2006, fue el segundo momento.
“Si nuestro proceso de cambio avanza, avanzarán los procesos de otros países, porque Bolivia es un laboratorio político. Depende de lo que pase aquí para saber qué pasará en otros países.”
La búsqueda de la identidad es el eje principal de la descolonización a través de una revolución cultural, así definió el proceso que vive Bolivia desde 2006 el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas.
En entrevista con Cambio, Cárdenas explicó que los bolivianos son los principales protagonistas de la descolonización en Bolivia, en especial los servidores públicos de la mano del gobierno que preside Evo Morales desde 2006.
Además para la autoridad la descolonización es la acción de despojarnos de las taras de la herencia colonial y confrontar a la “modernidad” que “individualiza” la visión del boliviano. El presidente Evo Morales en reiteradas oportunidades consideró que este proceso parte por la descolonización de la mente.
—En su calidad de autoridad de Estado, ¿cómo define la descolonización?
—La descolonización es despojarnos de nuestras taras de la herencia colonial y comportamientos individualistas jerarquizantes, como pensar que el que tiene corbata es superior al que no la tiene.
—Desde su punto de vista, ¿cuál fue el primer acto de descolonización en el país?
—El primer acto descolonizador fue la instalación de la Asamblea Constituyente (2006) con la presencia de hombres y mujeres indígenas de todas partes, que redactaron la nueva Constitución Política del Estado Plurinacional, descolonizada (promulgada en febrero de 2009). 
El siguiente momento fue cuando el presidente Evo Morales nacionalizó los hidrocarburos, el 1 de mayo de 2006.
— ¿Cuáles son los avances de la descolonización en el país?
—El primero es un libro, fruto del primer encuentro de la descolonización, que nos señala cuáles son nuestros puntos de partida, desde qué lugar empezó el proceso de descolonización para asumir que Bolivia es un Estado colonial.
—¿Cuáles son los aportes de esos encuentros de descolonización?
—Las Fuerzas Armadas, que hace 30 años han incorporado a las mujeres en el Colegio Militar, este año tendrán la primera generala; ésa es parte de la inclusión en el aspecto de la despatriarcalización.
También las normales están incorporando puntos de descolonización, despatriarcalización, y los ministerios hacen los esfuerzos para aplicar esa política.
—¿Cuáles son la debilidades en este proceso?
—Necesitamos tener más información de todos los ministerios, gobernaciones, municipios, normales superiores y otros; que informen cuánto hacen sobre la descolonización y la despatriarcalización.
—¿Qué obstáculos identifica en este proceso de descolonización y despatriarcalización?
—La descolonización no es un asunto de decreto o ley, son iniciativas propias, creatividad; y no las hemos visto. Creo que también hay que tener la capacidad de autocriticarse.
Hay ministerios que se han quedado atrapados en el burocratismo, en lo que es la modernidad, la individualidad, cuando un funcionario público piensa qué es lo que tiene que hacer personalmente y no le interesa el resto; es decir el individualismo, y no le interesa si avanza o no el proceso porque él cumple su trabajo para el cual lo contrataron.
—¿Cuáles son las consecuencias de la modernidad?
—La carencia de convicción sobre lo que es la calidad del proceso. No hay compromiso del servidor público con este proceso, lo que quiere decir es que no hay fortaleza política ideológica.
—¿Cuál es la expectativa de los servidores públicos respecto de la descolonización, entendiendo que es una revolución cultural?
—Hay que tocar la campana de alarma para decirles a los servidores públicos: No podemos pedir que la sociedad se descolonice si primero no se descoloniza el servidor público, que es la muestra del Estado, es el rostro del Estado.
Tenemos un servidor público con rostro colonial, racista, discriminador, patriarcal y jerarquizante.
No podemos esperar los tiempos políticos, tenemos que arrancar y profundizar la descolonización, por ejemplo analizar el perfil del servidor público.
—¿Cuál debe ser el perfil del servidor público descolonizado?
—Debe hacer primero un diplomado de descolonización como condición de acceso al trabajo en la entidad pública. Para eso estamos trabajando como condición para la permanencia en el trabajo. No podemos esperar a que la gente por voluntad propia asuma, cambie, que sea más inclusiva, más intercultural.
Ahora, si quiere trabajar en la administración pública es necesario este diplomado junto con otros requisitos. La militancia en algún partido político casi es irrelevante en relación con la formación política ideológica.
—¿Qué elementos reunirá el diplomado de descolonización?
—El idioma es uno de los elementos.  Tenemos dos años para que cada servidor público hable el idioma del territorio donde trabaja, como condición de mantenerse en el trabajo o acceso al trabajo, que ya casi de ipso facto está incorporado en el diseño del diplomado.
Pero también tiene que haber interculturalidad e intraculturalidad, la historia clandestina de los procesos libertarios.
—En este contexto, ¿cuál debe ser el sentimiento del servidor descolonizado?
—Debe sentirse orgulloso pese a que uno de los pecados originales del Estado fue la forma de su creación, donde nos hicieron creer que somos una sola nación, un solo idioma, una sola religión. La concepción monolineal debe encontrar su identidad verdadera.
—¿Qué pasaría si no funciona la descolonización en el marco del proceso de cambio?
—La descolonización debe darse en varios estamentos porque somos un laboratorio político. Bolivia es un laboratorio político. Depende de lo que pase con nuestro proceso para saber qué pasará con otros países del mundo.
Si nuestro proceso de cambio avanza, avanzarán los procesos de otros países
.
Fuente: Cambio, lunes 4 de junio, 2012.
Entrevista a Félix Cárdenas, viceministro de Descolonización.

No hay comentarios:

Publicar un comentario