Los
profesionales médicos y el sector salud, en estos más de treinta días, frente a
la mirada azorada de los bolivianos/as, debelaron la ´calidad humana` con que
tratan a diario a sus pacientes en los hospitales.
Protestas sin eco. Con
paros, huelgas de hambre, bloqueo de caminos, jeringas infectadas con VIH (1),
petardos, dinamitas, canicas, globos con pintura y chicharrón trataron de
amedrentar al Gobierno de la mayoría de los bolivianos/as. (2) Se les acabó la
iniciativa. Hasta recibieron la ayuda de cándidos universitarios de las
carreras de medicina de la UMSA como de la UPEA para la confrontación con la
policía, buscando muertos. (3) Nada les resultó. ¿Y ahora qué más viene?
Miopía. Ellos creen que
radicalizando las medidas podrán doblar el brazo al Gobierno. Si fuera así,
hace tiempo lo hubieran conseguido, pero hasta ahora siguen perdiendo y sacrificando a la gente
que necita atención médica urgente y no les interesa. Saben también que el régimen
actual tiene suficiente musculatura como para resistir embates de sectores que
apuestan al fracaso del Proceso de Cambio, porque la misma población boliviana
lo parió. Y no es posible dar vuelta atrás.
Entonces, a lo que apuestan
es, con la ayuda de los cobistas, maestros y partidos políticos de derecha
colgandijos, al desgaste de la imagen
del Gobierno y levantamiento de paceños y de alteños, sofocándolos con
diferentes medidas de presión. Y al final, con todo este escenario de alto
riesgo, la renuncia del Presidente.
El técnico de la Fundación
Unir, Elías Troche, en declaración a la Red Erbol, manifestó que el país se encuentra en un ´escenario de
alto riesgo` por los conflictos sociales irresueltos, sin embargo, todavía no se
vive una crisis de gobernabilidad, porque la evolución de los conflictos va por
etapas.
“Pongo como ejemplo que hace
60 días que se escuchaba pedir la renuncia de un X ministro o X autoridad y
ahora aparecen voces que hablan de renuncia del Presidente (Evo Morales)”. (4)
Batalla perdida. Lo correcto
sería que se pongan a reflexionar y a deponer actitudes de soberbia e
intolerancia, porque así no lograrán nada. Se metieron en una batalla que nunca
podrán ganar, por más que realicen las más ingeniosas presiones. Pues son minoría
social y cuantitativa.
Huelga de hambre con
chicharrón. Lo jocoso de todo este evento lo dio a conocer el Presidente del
Estado Plurinacional en conferencia de prensa. Dijo que los ayunadores ´comen
chicharrón`. Esto es una verdad que no sorprende a muchos. Ni los radicales
trotskistas pudieron aguantar la huelga y el tapiado ni cinco días, y los que
nunca ayunaron ni son de izquierda,
dicen soportar hasta las últimas consecuencias. Sólo discurso para la
prensa sensacionalista. Lo que deberían
hacer es volver a sus fuentes de trabajos, que para eso les pagamos todos los
bolivianos.
Notas:
(1) Cambio,
4 de mayo, 2012.
(2) Red
Uno, Cadena A, ATB, PAT, Bolivia TV, 7-11 de mayo, 2012.
(3) Patria
Nueva, 4 de mayo, 2012.
(4) Declaración
de Elías Orellana a Erbol, 4 de mayo, 2012.

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